Humberto Ovando Córdova relata la destrucción de su campo y el daño a su ganado, pidiendo a las autoridades que controlen las quemas en medio de la severa sequía que afecta a la región
Humberto Ovando Córdova, un ganadero propietario de la hacienda Lomas de Ovando, ubicada en el departamento del Beni, ha denunciado la devastación causada por un incendio que arrasó con todo su campo. En un testimonio cargado de impotencia, Ovando explicó que las llamas no solo quemaron la vegetación de su propiedad, sino que también destruyeron la infraestructura esencial para su trabajo.
«Soltaron los alambres, todos los postes, el tractor que trabajaba en el lugar por poco y se quema», relató, añadiendo que el daño no se limitó a las pérdidas materiales.
El incendio alcanzó uno de sus potreros donde había 35 yeguas que, aunque fueron rescatadas a tiempo, sufrieron quemaduras en sus cuerpos.
“Logramos salvarlas del fuego, pero sufrieron quemaduras en su cuerpo”, dijo Ovando, evidenciando la magnitud de la tragedia.
En su denuncia, el ganadero hizo un llamado urgente a las autoridades, pidiendo un control más estricto sobre los responsables de las quemas.
«Yo quisiera por favor que las autoridades revisen y que controlen quienes son los que queman, si los que van a cazar o los que van a pescar», manifestó. Según Ovando, algunos cazadores y pescadores podrían ser los responsables al dejar cigarrillos encendidos, lo que, en medio de una sequía extrema, provoca incendios de rápida propagación.
«Soltaron los alambres, todos los postes, el tractor que trabajaba en el lugar por poco y se quema»
«Ahorita, con semejante sequía, el fuego se enciende y se propaga rápidamente», agregó con preocupación.
Además de la negligencia, Ovando señaló que podría haber intenciones maliciosas detrás de estos incidentes.
«Hay gente que solo busca dañar la producción y que solo perjudican el trabajo que realizamos los productores», afirmó, evidenciando su frustración ante la falta de control y protección hacia los productores que, como él, dependen de sus tierras para subsistir.
Fuente: FEGABENI
Redacción: Publiagro