Productores enfatizan que sus afiliados soyeros no utilizan la quema como método para habilitar tierras agrícolas

Foto: ANAPO

La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) ha manifestado su profunda preocupación por los devastadores incendios forestales que han arrasado más de 3 millones de hectáreas en Santa Cruz. Estos incendios están causando graves daños a la biodiversidad y a las comunidades locales, lo que requiere una acción inmediata y coordinada por parte de las autoridades.

El presidente de ANAPO, Fernando Romero, expresó que «es lamentable ver cómo los incendios destruyen vastas áreas de nuestro territorio, afectando no solo la biodiversidad, sino también a las familias y comunidades locales». Romero demandó el cumplimiento riguroso de la ley y la imposición de sanciones ejemplares para quienes participen en la quema descontrolada. «La producción agrícola responsable es nuestro pilar, y estamos comprometidos con el desarrollo sostenible del país», agregó.

ANAPO enfatiza que sus productores no utilizan la quema como método para habilitar tierras agrícolas. En lugar de ello, el sector ha adoptado prácticas conservacionistas, como la siembra directa, la rotación de cultivos y el uso de rastrojos, con el objetivo de preservar el suelo y garantizar la sostenibilidad.

 «La producción agrícola responsable es nuestro pilar, y estamos comprometidos con el desarrollo sostenible del país»

 

De acuerdo con los datos a los que tuvo acceso ANAPO, los incendios con focos de calor han tenido una mayor incidencia en áreas como San Matías (28%), San Ignacio de Velasco (21%), Concepción (13%), San Rafael (10%) y Urubicha (8%). Estas áreas no cuentan con vocación de uso de suelo agrícola, lo que demuestra que no están relacionadas con una expansión de la frontera agrícola, como algunos activistas ambientales malintencionadamente intentan implicar al sector soyero.

Además, se indicó que los incendios se concentran principalmente en tierras fiscales (46%), Tierras Comunitarias de Origen (TCO) (22%) y tierras comunarias (7%), que en conjunto representan casi el 75% de las áreas afectadas por los focos de calor.

Romero subrayó la necesidad de fortalecer la vigilancia en estas áreas. «Es esencial que se refuercen las políticas de control sobre las tierras fiscales y comunitarias, donde se concentra la mayor parte de los focos de calor. Debemos priorizar la protección de estas áreas y castigar a quienes causan estos incendios que tanto daño le hacen a nuestro país», afirmó.

Asimismo, Romero reafirmó el compromiso del sector oleaginoso con la sostenibilidad y la preservación del medioambiente. «Rechazamos categóricamente cualquier intento de vincular al sector soyero con los incendios forestales. Nuestros agricultores están comprometidos con el manejo sostenible del suelo y han adoptado tecnologías que protegen la fertilidad de la tierra, contribuyendo a una producción responsable y de largo plazo», concluyó.

ANAPO hace un llamado a las autoridades para que actúen con firmeza y apliquen sanciones ejemplares a los responsables de los incendios. Al mismo tiempo, la asociación reitera su compromiso de seguir trabajando por una agricultura sostenible que respete y proteja los recursos naturales del país.

 

Fuente: Anapo