Piscicultores enfrentan pérdidas significativas y buscan soluciones urgentes para proteger sus producciones ante el frío inusual
La comunidad de La Enconada, en el municipio de Cotoca, está enfrentando una crisis sin precedentes. Los piscicultores de la zona están viendo morir a sus peces debido a las bajas temperaturas, que han causado la congelación del agua en las pozas. Este fenómeno ha afectado gravemente la producción, dejando a los productores en una situación desesperada.
Hasta el momento, se han reportado al menos 250 peces muertos, lo que representa el 20% de la producción total. Los pacúes, una especie muy requerida en la sociedad cruceña, continúan muriendo, y los piscicultores se ven obligados a sacar los peces muertos de las lagunas. Con un peso de aproximadamente 1,5 kilos están siendo vendidos a un precio de hasta 10 bolivianos, en un intento por mitigar las pérdidas.
«Hemos tenido que quemar leña para evitar que la helada llegue a las lagunas y el agua se congele. Hoy hemos ido a sacar más peces muertos; es una situación nueva, nunca nos había pasado»
José Domingo Serrano Peñaranda, un piscicultor de la comunidad con ocho lagunas, relata la gravedad de la situación y lo que han tenido que realizar para evitar que el agua se congele.
«Hemos tenido que quemar leña para evitar que la helada llegue a las lagunas y el agua se congele. Hoy hemos ido a sacar más peces muertos; es una situación nueva, nunca nos había pasado», confiesa Peñaranda. Esta es la primera vez que enfrentan un evento de esta magnitud, lo que ha dejado a muchos productores sin saber cómo proceder.
La quema de leña para calentar las lagunas ha sido una medida desesperada, pero insuficiente para detener la mortalidad de los peces.
La situación pone de manifiesto la vulnerabilidad de los sistemas de producción piscícola ante cambios climáticos extremos y la necesidad de desarrollar estrategias de mitigación y adaptación más efectivas. Mientras tanto, los productores de La Enconada continúan enfrentando desafíos significativos en su lucha por salvar lo que queda de su producción y sostener sus medios de vida.
Fuente: José Domingo Serrano
Redacción: Publiagro
