Hay preocupación porque la producción se ha reducido a más de la mitad y así no generan ganancia aseguran los productores

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Rene Rollano, dirigente campesino y representante de los productores en Tarija, ha expresado su preocupación por las dificultades que enfrentan los agricultores en la cosecha del maní restante. Según Rollano, la falta de maquinaria especializada para la cosecha de maní está complicando el proceso, exacerbado por la sequedad del suelo debido a la escasez de lluvias, el frío y los vientos que han retrasado las labores agrícolas.

«A pesar de las dificultades climáticas, hemos logrado avanzar bastante en la cosecha. Sin embargo, ahora nos preocupa enormemente la drástica caída de precios. El año pasado y meses atrás, el precio por quintal estaba entre 500 y 600 bolivianos, y ahora sorprendentemente ha caído a solo 350 bolivianos», informó Rollano.

Este brusco descenso en el precio del maní es alarmante para los productores, ya que también han visto disminuir los rendimientos por hectárea. Mientras antes cosechaban entre 50 y 60 quintales por hectárea, ahora solo logran obtener alrededor de 30 quintales, lo que dificulta generar ganancias con los precios actuales.

«A pesar de las dificultades climáticas, hemos logrado avanzar bastante en la cosecha. Sin embargo, ahora nos preocupa enormemente la drástica caída de precios. El año pasado y meses atrás, el precio por quintal estaba entre 500 y 600 bolivianos, y ahora sorprendentemente ha caído a solo 350 bolivianos»

Rollano atribuye la caída de precios a los intermediarios que especulan y fijan los precios a su conveniencia.

«Nosotros producimos con mucho esfuerzo y estamos sujetos cada año a los intermediarios en la comercialización. No tenemos los contactos para vender directamente, por lo que son los intermediarios quienes venden el maní a mercados como Santa Cruz, Cochabamba, La Paz y Oruro», explicó.

El dirigente campesino señaló además que, incluso en el caso del maíz en Santa Cruz, el precio supera los 50 bolivianos por quintal. En Yacuiba, donde aún no han comenzado a cosechar maíz, temen tener que vender a precios más bajos que los que se están ofreciendo en Santa Cruz.

 

Fuente: Publiagro