La polinización que realizan las abejas en el campo genera un incremento en la cosecha de ese elemento melífero
En el municipio de San Julián, ubicado en la zona Este de Santa Cruz, la agricultura y la apicultura son actividades productivas que se benefician mutuamente. En este caso los agricultores pueden resultar favorecidos por la acción polinizadora de las abejas en el cultivo del girasol por ejemplo, en la campaña de invierno.
Mediante esa acción de estos insectos benéficos se pueden obtener más y mejores frutos y semillas, mientras que los apicultores pueden obtener la miel y el polen en mayor cantidad para su posterior comercialización en los diferentes mercados del país.
Efraín Ibarra, integrante de asociaciones como Apadel y Apiflor, explicó que las colmenas que tienen están distribuidas en la Brecha Casarabe, La Asunta, la Colonia Berlín y otras zonas de San Julián.
“La mayor producción de miel para nosotros se da en la campaña de invierno con el cultivo del girasol, eso nos permite obtener mayor cantidad de miel, polen y otros derivados como el propóleo y cera”, indicó Ibarra.
Desventaja
Una de las desventajas que tienen que enfrentar los apicultores de esa región es la mortandad de abejas, debido al uso intensivo de plaguicidas en la actividad agrícola.
“Es una ventaja que tengamos la producción de girasol en San Julián, favorece a la apicultura porque permite obtener una mejor cosecha, también usamos la flora silvestre para ese propósito”
“Sufrimos el problema de mortandad por el tema de agrotóxicos, a pesar de eso la producción apícola se está afianzando en San Julián y consideramos que es una actividad rentable a pesar de ese inconveniente”, agregó el productor.
Producción
Anualmente cosechan en promedio hasta 50 kilos por colmena durante el año, con dos y hasta cuatro cosechas dependiendo de las condiciones en las que se encuentran los insectos melíferos.
“Es una ventaja que tengamos la producción de girasol en San Julián, favorece a la apicultura porque permite obtener una mejor cosecha, también usamos la flora silvestre para ese propósito”, sostuvo Ibarra.
Por otro lado, informó que en la campaña de verano la cantidad de miel se reduce porque los agricultores de esa zona optan mayormente por la siembra de soya que no favorece a la producción de miel.
Fuente: Publiago
