

Varios países ya están adoptando biocombustibles en sus rutas fluviales para una carga más limpia y eficiente




AMAGGI es el primer barco fluvial de Brasil propulsado 100% con combustible sostenible. Hizo su primera prueba desde Porto Velho – Rondonia, rumbo a Itacoatiara en Amazonas transportando 25 barcazas con granos en la fase de prueba la empresa obtuvo la primera autorización del país para utilizar biocombustible en un buque.
El permiso fue otorgado a principios de abril de este año por el Directorio de la Agencia Nacional del Petróleo (ANP) y marca un paso más hacia la descarbonización de las operaciones de la empresa, uno de sus principales compromisos para combatir el cambio climático.
Navegando por los ríos Madeira y Amazonas, la prueba también incluye el trayecto de regreso (Itacoatiara-Porto Velho) y el barco deberá tener un consumo promedio de 120 mil litros de biodiesel. El viaje completo debería durar una media de 225 horas, unos 10 días.
Barcos propulsados con Biocombustibles
El transporte de carga fluvial que funciona con biocombustible es una alternativa sostenible y eficiente para la exportación y carga de mercancías. Este enfoque combina dos elementos clave: el uso de vías fluviales para el transporte de carga y la utilización de biocombustibles como fuente de energía.
El beneficio es que los biocombustibles, derivados de fuentes renovables como aceites vegetales, cultivos energéticos y residuos orgánicos, ofrecen una alternativa más limpia a los combustibles fósiles. Al quemarse, emiten menos contaminantes atmosféricos, lo que contribuye a reducir la huella de carbono del transporte fluvial y mitigar el cambio climático.
Los motores que utilizan biocombustibles suelen ser altamente eficientes y pueden adaptarse fácilmente a los motores de los barcos fluviales. Esto puede traducirse en un menor consumo de combustible por tonelada de carga transportada, lo que resulta en costos operativos más bajos y una mayor rentabilidad para las empresas de transporte.
Accesibilidad
Muchas regiones del mundo cuentan con extensas redes fluviales que son subutilizadas para el transporte de carga. El uso de biocombustibles en barcos fluviales puede hacer que estas vías sean aún más accesibles y económicas para el transporte de mercancías, especialmente en áreas donde la infraestructura terrestre es limitada o costosa de desarrollar.
Cumplimiento de regulaciones ambientales
Con la creciente preocupación por la calidad del aire y las emisiones de gases de efecto invernadero, el transporte fluvial que funciona con biocombustibles puede ayudar a las empresas a cumplir con las regulaciones ambientales más estrictas, evitando multas y mejorando su reputación corporativa.
Países con barcos fluviales con biocombustibles
Varios países alrededor del mundo están adoptando el uso de biocombustibles en el transporte fluvial para la exportación y carga de mercancías. Algunos ejemplos destacados incluyen: Estados Unidos, ahora Brasil, Alemania, Países Bajos y Francia, que tienen sistemas fluviales bien desarrollados y que están liderando este cambio hacia una navegación más sostenible. China está buscando activamente formas de reducir su dependencia de los combustibles fósiles y abordar los problemas de contaminación. Al igual que China, India cuenta con una gran cantidad de vías fluviales navegables que podrían aprovecharse para el transporte de carga.
Estos son solo algunos ejemplos de países que están utilizando biocombustibles en el transporte fluvial para la exportación y carga de mercancías. La tendencia hacia una mayor sostenibilidad y la búsqueda de alternativas a los combustibles fósiles están impulsando este cambio en todo el mundo.
Fuente: Amaggi
Redacción: Publiagro