Este gusano está generando pérdidas de casi el 60 % de la producción de tomate en municipios de Mairana

Tomates afectados por el gusano perforador en Hierba Buena Militar / Foto: Adderly Arteaga
Capacitaciones del CIAT sobre el manejo y control del gusano/ Foto: Adderly Arteaga
Foto: Adderly Arteaga

En respuesta a los recientes eventos en las zonas de Hierba Buena Militar – Mairana, donde la producción de tomate se ha visto afectada por el gusano perforador, que ha dejado casi el 60 % de la cosecha destruida, se han tomado medidas para abordar esta situación.

El gusano perforador del fruto es una plaga que puede causar importantes daños económicos en cultivos de hortalizas como el tomate. Su principal impacto se debe a las cavidades que genera en los frutos, dejando excrementos abundantes y perforaciones que facilitan la entrada de microorganismos, como hongos y bacterias.

El ingeniero Adderly Arteaga, técnico del CIAT, ha informado que se llevó a cabo una jornada técnica sobre el control y manejo del gusano perforador del fruto. El objetivo de esta jornada es evitar que esta plaga continúe causando daños y pérdidas en los cultivos de los productores de Mairana.

«No hay una razón exacta para la aparición del gusano, pero debido a una campaña bastante seca, se presume que el problema se debe a la escasez de agua. Esta falta de humedad ha propiciado un brote más rápido de las larvas¨, explicó.

El ingeniero señaló que, si bien esta plaga siempre ha representado una amenaza, no era común en la zona de los Valles, o al menos no era la plaga principal. Anteriormente, otras plagas son controladas fácilmente debido a su conocimiento por parte de los productores. Sin embargo, el gusano perforador ha sorprendido a los agricultores, quienes aún no han logrado controlarlo.

«No hay una razón exacta para la aparición del gusano, pero debido a una campaña bastante seca, se presume que el problema se debe a la escasez de agua. Esta falta de humedad ha propiciado un brote más rápido de las larvas¨

Daños que genera la plaga

El adulto puede depositar entre 60 y 70 huevos blancos cerca de la superficie de los frutos, especialmente durante las horas de la mañana. Las larvas emergen y penetran directamente en el fruto, dejando perforaciones. Después de un ciclo de aproximadamente 20 días, durante los cuales se alimentan de la pulpa del fruto, las larvas salen y se envuelven en las hojas, o descienden al suelo para pupar.

Manejo

No existe un producto químico específico para controlar esta plaga, explicó el ingeniero. En su lugar, recomendó implementar un manejo integrado de la plaga.

«Una vez que se haya plantado el tomate, es importante colocar trampas con feromonas específicas para el gusano perforador. Estas trampas, que van desde dos hasta cuatro en la etapa de monitoreo inicial, no se utilizan para controlar la plaga, sino para monitorear su presencia. Sin embargo, para llevar a cabo un control masivo y detener la proliferación de la mariposa, se recomienda instalar de 20 a 40 trampas con feromonas», explicó el ingeniero.

Es importante destacar que esta plaga solo ataca durante la noche, siendo nocturna y no visible durante el día. Por lo tanto, cualquier aplicación de químicos debe realizarse exclusivamente durante la noche. Sin embargo, Arteaga siempre recomienda realizar primero un monitoreo de la plaga. Esto se debe a que la mariposa deposita sus huevos cuando el tomate aún está en una etapa temprana de desarrollo. Además, los huevos tienen una particularidad: tardan entre 10 y 20 minutos en penetrar en el fruto. Una vez dentro, ningún insecticida resulta efectivo, y los agricultores se percatan del daño cuando el tomate ya está podrido.

 

Fuente: Publiagro