

Un arduo trabajo de años para llegar a tener vacas de buena producción de leche a campo




La Cabaña Esterlina se ha dedicado durante los últimos 20 años al mejoramiento genético de la raza Gyr Lechero, fusionando la genética boliviana y brasileña con ejemplares importados de las mejores cabañas de Brasil y las vacas más reconocidas tanto de Bolivia como de Brasil. Este esfuerzo ha convertido a la cabaña en un referente, al combinar lo mejor de ambas regiones en su ganado.
Andrés Nacif, gerente general de la Cabaña Esterlina, resalta que la producción de leche es su campo de especialización, y destaca la admirable capacidad de adaptación de la raza Gyr a diversos climas. Además, señala el valioso aporte que esta raza brinda a la cuenca lechera más importante del país.
«Nuestra raza es ideal para la producción lechera en condiciones de campo. La Gyr, originaria de la India, es una raza cebuina por excelencia, muy rústica y adaptable al trópico. Gracias al cruce con Holando, obtenemos animales con alta producción láctea y a un costo reducido», destaca Nacif.
La Girolando ha surgido como la raza predominante en las lecherías de Bolivia, Brasil y otras partes del mundo.
«Para obtener una buena Girolando, es fundamental comenzar con una excelente vaca Gyr», subraya Nacif.


«Tenemos la esperanza de establecer un nuevo récord en la producción de leche en Bolivia»
Producción de leche
En la Cabaña Esterlina, las vacas producen leche en condiciones de campo, con una producción que oscila entre los 3.500 y 7.000 kilogramos en cada lactancia.
«Nuestras vacas pasan todo el día en los potreros y reciben suplementación durante el proceso de ordeña. Aquellas que participan en concursos lecheros reciben un cuidado especial», explica Nacif.
Actualmente, la cabaña ostenta el récord nacional de producción de leche, con una vaca que produce 38.4 kilogramos. Asimismo, las vacas que participan en el concurso lechero de la Exponorte han demostrado su calidad, con una vaca que desde el primer día de ordeña ha producido 51 kilogramos.
«Tenemos la esperanza de establecer un nuevo récord en la producción de leche en Bolivia», añade con optimismo Andrés Nacif.
Fuente: Publiagro