Auguran rendimientos bajos en la productividad y muy pocas esperanzas de tener mayores alcances productivos

Foto : Internet

Actualmente, los agricultores están enfrentando una situación muy difícil. La sequía que ha afectado a nivel nacional, junto con los altos precios de los insumos, alquileres, transporte y otros aspectos logísticos necesarios para la siembra, representan una carga abrumadora para el pequeño productor.

El productor de soya y arroz en San Pedro, Gary Soria, mencionó que su siembra se llevó a cabo en una temporada tardía debido a la falta de lluvia en sus campos. Como resultado, espera un retraso en su cosecha en comparación con otros productores que están a punto de iniciar la suya.

 “Los rendimientos tanto en soya y maíz no serán, lo que se esperaba para esta campaña de verano, ni para la de invierno, porque va haber déficit de grano”

Con un tono sombrío, Soria expresó su preocupación acerca de que los rendimientos no alcanzarán las expectativas previstas, ya que muchos productores agrícolas a nivel nacional se enfrentan a la misma situación.

“Los rendimientos tanto en soya y maíz no serán lo que se esperaba para esta campaña de verano, ni para la de invierno, porque va haber déficit de grano”, dijo preocupado.

En el caso de Soria, lamentablemente, perdió 80 hectáreas de arroz debido a la sequía, y su área de soya es bastante reducida. El productor agrícola admitió que decidió sembrar solo soya debido a un compromiso de entrega, aunque sabía que sembrar fuera de temporada no era lo más recomendable.

Soria expresó su profunda preocupación ya que anticipa rendimientos bajos tanto en su producción como a nivel nacional. Con gran pesar, señaló que solo podrá cosechar dentro de dos meses, pues no le quedó otra opción más que sembrar tarde. Su esperanza radica en poder recuperar los costos de logística y productos químicos para mantenerse a flote, aunque sin generar ganancias.

Agregó que cuando un productor agrícola siembra fuera de temporada, no se obtienen rendimientos significativos, solo se logra recuperar parte de la inversión realizada. Por lo tanto, asegura que no resulta un negocio rentable para el agricultor. Insistió en que sembrar fuera de temporada implica enfrentarse a altos costos de semillas, productos químicos, alquileres, fumigación y transporte, lo cual representa una carga significativa para el pequeño productor agrícola.

“En esta época actual para ser agricultor hay que pensar y buscar alternativas”, aseguró.

 

Fuente: Publiagro