Autoridades del gobierno municipal de San Julián harán una inspección técnica en las zonas afectadas para recaudaran datos y de acuerdo a los resultados se tomará la decisión de declaratoria de emergencia
Autoridades municipales, productores y agricultores de San Julián se reunieron para debatir la situación de los cultivos sembrados para la campaña de verano y analizar los datos recopilados para determinar si se debe declarar emergencia o desastre en la zona.
Asimismo, se realizó una comparación con la campaña del año pasado, durante la cual también se registraron pérdidas debido a las lluvias que provocaron inundaciones. Para estas fechas el año pasado, los productores se encontraron con caminos cortados y cultivos bajo el agua debido a las intensas precipitaciones.
Este año fue el contraste de la situación: hubo sequía total, con escasas lluvias esporádicas que no permitieron completar la cantidad de hectáreas proyectadas para el verano. Aunque algunos sectores recibieron lluvias, en otros no ha caído suficiente agua.
El alcalde de San Julián, Willy Calderón, y el Comité de Cooperación de Emergencia de San Julián informaron que lo primero que se realizará esta semana será visitar las zonas afectadas por la sequía.
«Ahora sabemos que los sectores más afectados están en La Asunta, Montenegro, San Martín y todo Villa Paraíso. La mayor parte de lo sembrado ha fracasado y han tenido que volver a sembrar. Se ha realizado una fuerte inversión, especialmente en semillas para la doble siembra y en maquinaria», informó el alcalde.
«Ahora sabemos que los sectores más afectados están en La Asunta, Montenegro, San Martín y todo Villa Paraíso. La mayor parte de lo sembrado ha fracasado y han tenido que volver a sembrar. Se ha realizado una fuerte inversión, especialmente en semillas para la doble siembra y en maquinaria»
El alcalde destacó que la producción está financiada por las empresas, las cuales son pagadas por los productores después de la cosecha. Sin embargo, si hay un bajo rendimiento, los productores podrían no cumplir con sus obligaciones financieras hacia las empresas, lo que resultaría en deudas.
El alcalde expresó la necesidad de recopilar datos en las áreas más afectadas para determinar si se deben declarar estados de desastre. Destacó la urgencia de obtener información para poder brindar ayuda a los productores, ya que los plazos del banco no esperan y es necesario conocer la situación para tomar decisiones adecuadas.
El gobierno municipal se comprometió a llevar a cabo inspecciones en campo con el fin de recopilar datos de las diversas zonas productoras. Estos datos permitirán determinar la magnitud de las pérdidas en cultivos como la soya, el arroz y el maíz.
Con toda esa información, el Gobierno Municipal puede proceder a negociar con los bancos para explorar la posibilidad de reprogramar las deudas pendientes, teniendo en cuenta las circunstancias de pérdidas en los cultivos.
Según el mapa de monitoreo presentado en la reunión, se observa que la mayoría de los productores no han arriesgado sembrar debido a las condiciones adversas.
Se pueden identificar tres escenarios: aquellos que sembraron pero tuvieron malos resultados, los que sembraron en áreas con suficiente lluvia y están en una situación favorable, y los que no sembraron debido a la falta de agua, particularmente en las zonas del sur de San Julián y en Cuatro Cañadas.
Fuente: Publiagro