El docente e investigador Marín Condori anunció que este jueves irá a esa región para evaluar los daños en el área de los ensayos
La Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), en colaboración con la empresa ALTEI, está trabajando en la multiplicación de semillas comerciales de quinua tropicalizada para su uso en la próxima campaña de invierno. Este proyecto está siendo coordinado por el docente e investigador Marín Condori, y se está llevando a cabo en los municipios de Quirusillas y Vallegrande.
Lamentablemente, las últimas lluvias registradas en la región han causado daños severos en las parcelas donde se instalaron los ensayos. Además, el desborde de las quebradas y un río ha generado una afectación considerable a otros cultivos. Es importante evaluar los daños y tomar medidas para mitigar las pérdidas y continuar con el trabajo de investigación en la medida de lo posible.
“Para la multiplicación de semilla de quinua tenemos parcelas en Quirusillas donde hacemos los ensayos, este jueves estaré por allá para ver la situación porque hay zonas que han sido afectadas al 100%. Ojalá que no haya entrado mucha agua al sector donde desarrollamos este trabajo”, dijo Condori.
“Para la multiplicación de semilla de quinua tenemos parcelas en Quirusillas donde hacemos los ensayos, este jueves estaré por allá para ver la situación porque hay zonas que han sido afectadas al 100%. Ojalá que no haya entrado mucha agua al sector donde desarrollamos este trabajo”
Se trata de un área de ensayo que no supera las tres hectáreas, la cual se suma a otra área de ensayos ubicada en Vallegrande. El personal técnico de ALTEI ya se encuentra en el lugar para evaluar la situación de los cultivos y determinar los daños ocasionados por las lluvias y los desbordamientos de las quebradas y el río.
Ventaja de la semilla de quinua tropicalizada
Por otra parte, se reconoce que debido a las precipitaciones en los valles cruceños, habrá problemas en la producción de semilla de quinua tropicalizada. Sin embargo, lo que se obtenga se proveerá a los agricultores en la próxima campaña de invierno.
“La ventaja de la semilla de quinua tropicalizada es que con cuatro o cinco kilos se puede sembrar una hectárea, no es como el trigo o la soya que se necesitan de 60 a 120 kilos”, explicó el investigador.
Mayor aprendizaje en el manejo
Muchos agricultores están curiosos y predispuestos a probar que la quinua se integre a su modo de siembra, como un cultivo alternativo durante el invierno.
“La quinua es un cultivo muy rentable y por eso la gente quiere adoptarla en su sistema de siembra, pero hay que ir de a poco, porque necesitamos mejorar el manejo en cuanto al uso de herbicidas y épocas de siembra”, remarcó Condori.
También se precisa optimizar el proceso de la cosecha, poscosecha, control de malezas de hoja ancha, enfermedades y otros detalles que hay que seguir aprendiendo.
Con esos conocimientos al 2030, según el docente, se estima que habrá una superficie interesante de siembra de quinua una vez que la gente conozca y aprenda el manejo eficiente del cultivo.
Por ese motivo calificó al 2023 como una campaña de aprendizaje y se espera que la siguiente sea mejor con un detalle importante que la quinua tropicalizada rinde de 3 a 10 veces más que en el Altiplano. Esto significa de 3000 a 5000 kilos por hectárea contra poco más de 500 kilos.
Fuente: Publiagro