Es una celebración tradicional para los pueblos de Oruro, donde los comunarios visitan y adornan los campos y corrales, colocando colores llamativos en sus producciones

Agradecimiento a la madre tierra por la cosecha / Foto: La Patria

La Anata Andina es una manifestación cultural de los pueblos durante la época de la siembra y fertilidad de la Madre Tierra. Esta fiesta demuestra la armonía con la Madre Tierra y fortalece la identidad cultural viva de la región.

Esta celebración tradicionalmente se lleva a cabo durante los dos días previos al sábado de la entrada del Carnaval de Oruro.

Esta celebración está estrechamente ligada al florecimiento de los campos y los primeros frutos de la producción agrícola. En consecuencia, forma parte del agradecimiento a la Madre Tierra por los productos de la temporada de lluvias durante la época del Jallupacha.

«Es el tiempo de agradecimiento a la Pachamama por el florecimiento de los campos y el crecimiento de las crías de los animales. Por tanto, hablar del Anata Andino es hablar de la riqueza multicultural y de la dimensión religiosa de agradecimiento por la lluvia y los productos agrícolas y pecuarios», señaló el productor Modesto Quispe, quien se dedica a la cría de ovejas y a la agricultura, cultivando habas, papas y chuño.

«Es el tiempo de agradecimiento a la Pachamama por el florecimiento de los campos y el crecimiento de las crías de los animales. Por tanto, hablar del Anata Andino es hablar de la riqueza multicultural y de la dimensión religiosa de agradecimiento por la lluvia y los productos agrícolas y pecuarios»

Para las comunidades, no todo termina ahí; más bien, es el inicio de una serie de festividades que se llevan a cabo durante el tiempo de lluvias y la temporada agrícola. Cada comunidad iniciará su celebración desde el Domingo de Carnavales.

Por ejemplo, en la localidad de Bombo, del municipio de Huanuni, Quispe explica que se llevará a cabo el ‘warak’anaku’, una tradicional celebración donde los comunarios se lanzan manzanas verdes con hondas, el domingo, que es el primer día de carnaval.

El día lunes y martes, se visitan los sembradíos y se adornan los campos. En algunos lugares, especialmente donde crían animales, el martes por la tarde se visitan los corrales del ganado camélido (llamas) y ovino (ovejas) para colocar adornos en las orejas de estos animales con lanas de colores vivos.

Luego se lleva a cabo el ‘takipayanaku’, que es el intercambio de canciones entre hombres y mujeres, seguido de bailes donde comparten la chicha elaborada por ellos mismos, junto con los frutos y tubérculos que les ha regalado la Madre Tierra.

El día miércoles, las comparsas entran en acción, como sucede en Pocoata. Así podemos apreciar la riqueza cultural de agradecimiento a la Madre Tierra durante esta época agrícola

Fuente: Publiagro