

Productores agrícolas lamentan esta situación, pues este año el ciclo productivo no está por buen camino y auguran bajos rendimientos
La escasez de agua en Cordillera está generando inquietud entre los productores agrícolas, ya que en muchos casos, la siembra se realiza únicamente durante la temporada de cultivo. En este contexto, la producción de maíz ha experimentado bajos rendimientos en años anteriores, y este año parece no ser la excepción, dado que hace varios días que no llueve y gran parte de los cultivos de este grano se están secando.
Offman Blanco, productor de maíz de la provincia Cordillera, expresó su preocupación ya que el cultivo experimenta un mal desarrollo agrícola desde hace aproximadamente 20 días, lo cual está perjudicando significativamente el crecimiento y rendimiento productivo.
En el caso del agricultor, quien sembró 120 hectáreas de maíz, las elevadas temperaturas que se experimentaron en su momento y la falta de agua han llevado a que el cultivo se esté secando.
Blanco mencionó que comenzó la siembra el 3 de enero y en la actualidad, gran parte de su cultivo se encuentra en estado seco.
“Nos falta lluvia, hace 20 días que no llueve y estamos preocupados por el rendimiento, ya que se acerca el invierno”, dijo el agricultor.
Manifestó su inquietud al señalar que desde hace tres años están enfrentando la misma situación, con una disminución progresiva en la producción cada año. Ante este panorama, se sienten desconcertados sobre cómo hacer frente a la sequía.


“Nos falta lluvia, hace 20 días que no llueve y estamos preocupados por el rendimiento, ya que se acerca el invierno”
En este contexto, añadió que cualquier cultivo depende de la lluvia, ya que en la zona no disponen de un sistema de riego. Por ende, la principal dificultad que enfrentan es la escasez de agua.
En el caso del productor agrícola, se dedica exclusivamente a la siembra de maíz, ya que en su zona las lluvias solo ocurren en esta época; posteriormente, hay meses secos. Afirmó que el agricultor ha venido experimentando pérdidas en la producción durante aproximadamente tres años, llegando al punto en que las inversiones realizadas agotan sus recursos y le impiden volver a sembrar.
Expresó con preocupación, que aún están intentando sembrar con semillas que no son mejoradas es decir que no son resistentes a la sequía y a diversas plagas.
Acotó que en Cordillera solían obtener excelentes rendimientos por hectárea, ya que la mayoría de los agricultores practicaban cultivos asociados entre la agricultura y la ganadería, especialmente durante la época seca. Sin embargo, todo ha ido cambiando debido a los fenómenos climáticos.
Fuente: Publiagro