El requerimiento inicial de la primera planta de biocombustibles que se instala en Santa Cruz es de al menos 70 mil litros de aceite

Fernando Romero, presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) brindó un informe sobre la producción de granos el 2023 en el que resaltó un leve incremento en la soya respecto del 2022, pero enfatizó en la necesidad de producir más para elaborar el biodiesel.

Según los datos presentados, en el año 2023 se alcanzó una producción total de soya de 3,215,000 toneladas, lo que representa un aumento del 5% en comparación con el año anterior. Este incremento se atribuye a las condiciones climáticas favorables durante la campaña de invierno, que elevaron la productividad promedio en dicho ciclo agrícola de 1.73 a 2.13 toneladas por hectárea.

Basándose en estos datos, calificó a la cadena oleaginosa como virtuosa, ya que genera excedentes, abastece de alimentos para Bolivia y atrae divisas del exterior mediante las exportaciones de soya y sus derivados.

Desde su perspectiva, todas estas ganancias se han logrado a través del arduo trabajo y de la apertura y mantenimiento de los mercados externos, lo que ha permitido que se mantenga como un rubro atractivo para la inversión.

“Lo que se necesita es producir más granos para tener más aceites y torta. El aceite puede ser utilizado localmente, industrializado y convertido en biodiesel”, dijo Romero.

“Necesitamos producir más soya, en base a la biotecnología que ya lo tienen nuestros países vecinos y otras condiciones como la seguridad jurídica, control del contrabando y otro tipo de incentivos”

Detalles

El presidente de ANAPO sostuvo reuniones con autoridades nacionales a lo largo de este año para discutir sobre el biodiesel. Durante estas reuniones, expresó que el sector puede desempeñar un papel crucial como proveedor de la materia prima, que es el aceite de soya, para alimentar las plantas de biodiesel. Sin embargo, destacó la necesidad imperativa de aumentar la productividad en este ámbito.

“Necesitamos producir más soya, en base a la biotecnología que ya lo tienen nuestros países vecinos y otras condiciones como la seguridad jurídica, control del contrabando y otro tipo de incentivos”, agregó Romero.

Requerimientos

El titular de ANAPO también comunicó que, según las primeras pruebas, los requerimientos iniciales de la primera planta de biodiesel que se está construyendo en Santa Cruz son de 70 mil litros de aceite de soya, el cual se produce a nivel local con un alto nivel de calidad.

En otra línea, el Gobierno nacional tiene la intención de establecer plantas de biodiesel aún más grandes, lo cual implica necesariamente un aumento en la producción para evitar distorsiones en la cadena de siembra y cosecha que ha llevado muchos años para alcanzar el éxito.

Fuente: Publiagro