El taller de buenas prácticas agrícolas de APRISA explicó a las empresas la importancia de llevar trajes de seguridad para evitar exposición del personal a los agroquímicos. También se enfocó en la condiciones de clima para una aplicación eficaz de productos en el campo

El aplicador de agroquímicos debe estar protegido desde los pies hasta la cabeza con un traje especial / Foto: Publiagro

El Taller de Capacitación en Buenas Prácticas Agrícolas (PROBUPA) parece ser una iniciativa valiosa para brindar asesoramiento técnico a las empresas en el uso y manejo adecuado de plaguicidas agrícolas, así como en la gestión adecuada de envases vacíos y la prevención de intoxicaciones por plaguicidas. La concienciación sobre la protección personal y el uso correcto de estos productos es esencial para garantizar la seguridad de los trabajadores y la aplicación efectiva de los plaguicidas en la agricultura.

¨Hemos enseñado, cómo se debe utilizar el traje de seguridad para evitar accidentes con los agroquímicos, cual es la lupa que hay que usar para diferentes plagas y enfermedades, que tipo de aplicaciones hay que hacer, que tipo de boquillas hay que usar. Lo que queremos es hacer un manejo integrado ̈, explicó el ingeniero Marcos Vargas.

Es crucial destacar la importancia de las medidas de precaución y el uso adecuado del equipo de protección personal al trabajar con productos químicos agrícolas. El énfasis en la seguridad y la instrucción detallada sobre cómo utilizar cada implemento proporciona a los trabajadores agrícolas la información necesaria para minimizar riesgos para su salud y bienestar. Además, al resaltar estos aspectos, se fomenta una cultura de trabajo responsable y seguro en el sector agrícola.

Manejo de productos y volúmenes

Es muy importante destacar la atención a los detalles en el manejo de productos agrícolas. La procedencia, la autenticidad y la fecha de caducidad son aspectos críticos para garantizar la efectividad y la seguridad de los productos utilizados en la agricultura. Además, la calidad del agua y el ajuste del pH son consideraciones clave para asegurar una aplicación efectiva y minimizar el impacto ambiental. La conciencia sobre estos aspectos contribuye a un manejo agrícola más sostenible y seguro.

¨Hemos enseñado, cómo se debe utilizar el traje de seguridad para evitar accidentes con los agroquímicos, cual es la lupa que hay que usar para diferentes plagas y enfermedades, que tipo de aplicaciones hay que hacer, que tipo de boquillas hay que usar. Lo que queremos es hacer un manejo integrado ̈

¨La tecnología de las boquillas y la maquinaria agrícola moderna permiten ajustar los volúmenes según las necesidades específicas de cada situación. La variación en el volumen puede depender de factores como el tipo de cultivo, la etapa de crecimiento, las condiciones climáticas y la tecnología utilizada¨, enfatizó Vargas

Se manejan volúmenes de 17 litros según la tecnología de la boquilla, de la maquinaria agrícola, y en volúmenes que son para desarrollo, son medidas que van desde los 100 a 200 litros por hectárea.

Condiciones climáticas para la aplicación

Cuando hay demasiada humedad y un excesivo calor el producto tiende a volatilizarse, lo que ocasiona pérdida del material químico, y va llegar menos activo de lo que se quiere lograr con el objetivo ya sea la plaga o el cultivo. Incluso no se debe realizar la aplicación del producto cuando exista demasiado sol en el campo.   

Fuente: Publiagro