Lamentablemente, la situación persiste, generando preocupación entre los productores, ya que en algunas zonas no hay suficiente alimento para el ganado, lo que obliga a muchos a continuar comprando forraje proveniente de Santa Cruz

Ganado lechero en Cochabamba con poco alimento disponible / Foto: Ramiro Medrano

La situación en el Valle de Cochabamba no ha experimentado cambios significativos a pesar de las lluvias. Los agricultores argumentan que las precipitaciones no son suficientes para permitir la producción de forraje, ya que los terrenos no son aptos para la siembra y la tierra se encuentra dura. Además, las lluvias son intermitentes, lo que obliga a los productores a adquirir alimento para el ganado en otros departamentos.

Ramiro Medrano, vicepresidente de la Asociación de Productores Lecheros de Cochabamba (APL), ha expresado que la situación es muy compleja debido a la escasez de forraje. Señaló que las lluvias en este departamento, especialmente en el sector del Valle, no han sido suficientes para mejorar la situación.

Ramiro Medrano señaló que alrededor de 5 mil productores en Cochabamba están lidiando con la escasez de alimento para el ganado como mejor pueden. Se espera que las precipitaciones de enero y febrero sean favorables para el sector y ayuden a mejorar la situación.

El productor también mencionó que están a la espera de que las lluvias pronosticadas llenen la represa de la Angostura, ya que este lugar es crucial para muchos que dependen de él para obtener agua.

“En nuestro caso, seguimos comprando los rollos de Santa Cruz”, sostuvo.

El productor de la zona Sur indicó que en el Valle Alto de Cochabamba no hay forraje, y la situación actual es difícil. Algunos productores se ven obligados a comprar rollos de pasto de la capital cruceña para alimentar a su ganado.

“El animal no se está alimentando como debe ser, el alimento está restringido, no podemos darle mayor ración como otros años”

Medrano explica que alimenta a sus animales dos veces al día con una mezcla de alimento balanceado, cascarilla de soya y paja de avena. 

Aunque produce alrededor de 160 litros diarios de leche, teme que la producción pueda disminuir debido a la escasez de alimento adecuado para los animales.

“El animal no se está alimentando como debe ser, el alimento está restringido, no podemos darle mayor ración como otros años”, lamento.

En años anteriores, se contaba con excedentes de forraje y pastos en abundancia, lo que permitía alimentar al ganado en cantidades adecuadas, dijo.

En cambio, destacó que la siembra de maíz no se ha llevado a cabo debido a la escasez de agua. En comparación con años anteriores, a estas alturas las plantas ya estarían en desarrollo, pero actualmente los terrenos permanecen abandonados debido a la falta de lluvias.

Fuente: Publiagro