Los nutrientes que la planta absorbe en cantidad, no pueden ser suplantados por otros elementos, es vital que el cultivo contenga, azufre, potasio y nitrógeno

Explicando la importancia de los nutrientes en el cultivo de la caña / Foto: Publiagro

Desde el punto de vista agronómico, los agricultores tienen la capacidad de llevar a cabo diversas actividades para maximizar el rendimiento de la caña que producen. Una nutrición adecuada desempeña un papel crucial, ya que el suministro óptimo de nutrientes no solo favorece el rendimiento de la caña de azúcar, sino que también mejora su contenido de azúcar y, por ende, su calidad.

David García, ingeniero agrónomo, explicó que la caña de azúcar debe contener nutrientes esenciales como el nitrógeno, potasio y azufre para garantizar una buena producción en el cultivo.

Los nutrientes nos proporcionan una buena cantidad de Grados Brix, lo cual asegura la presencia de sacarosa y, por ende, la obtención de azúcar en la caña», expresó el profesional.

Grados Brix

Los grados Brix son un indicador que mide la cantidad de azúcares que tiene un alimento, es decir es uno de los factores que definen la calidad interna de las frutas y hortalizas.

En este caso, el productor explicó que llevan a cabo la fertilización del suelo con sodio, potasio y nitrógeno, seleccionando fertilizantes que contengan una cantidad adecuada de estos nutrientes. Sin embargo, subrayó que la elección específica de los fertilizantes dependerá del análisis de suelo realizado, asegurando así una aplicación personalizada y eficiente de los nutrientes necesarios para el cultivo de caña de azúcar.

Humedad y temperatura 

También indicó los niveles de compactación en el suelo para determinar si la retención de humedad se debe a la presencia de materia orgánica o a la incapacidad del suelo para infiltrarse. No obstante, señaló que en el área donde se cultivan las cañas, el suelo presenta una formación adecuada de agregados, por lo tanto, no hay compactación en el suelo, lo que contribuye a mantener una buena temperatura y facilita las condiciones óptimas para el desarrollo de los cultivos. 

Por lo tanto, al tener buena humedad y temperatura, la planta puede absorber todos los nutrientes que se pueda establecer en las parcelas.

«Los nutrientes nos dan una buena cantidad de Grados Brix, lo cual nos garantizan la sacarosa y por ende la obtención de la azúcar en la caña»

David Garcia,productor de caña / Foto : Publiagro

Nutrición y calidad de suelo

García indicó que, en los suelos del departamento de Santa Cruz, no  existe deficiencia de Fósforo y de Potasio, sin embargo, no se tiene buenos contenidos de Nitrógeno y en este sentido es necesario agregar este nutriente a los diferentes campos, en especial a la caña de azúcar, por qué necesita buenas horas luz para poder desarrollarse.

El nitrógeno es importante para la alta producción, ya que estimula el crecimiento y desarrollo de la caña, promoviendo un macollaje más fuerte. Por otro lado, el fósforo es particularmente importante para el desarrollo radicular, crecimiento temprano de brotes, incremento de la productividad temprana y la extensión de los entrenudos.

En el caso del Potasio, la mayor parte,  se usa en el tallo de la caña y la máxima demanda del nutriente ocurre durante el período de crecimiento en el cual la absorción es mayor a cualquier otro nutriente.

Nuevamente subrayó que los nutrientes son fundamentales para que la planta se desarrolle de manera normal y saludable, lo que, a su vez, ayuda a prevenir posibles ataques de plagas o enfermedades en el cultivo. En este sentido, los nutrientes representan elementos esenciales que la planta absorbe en cantidades significativas y que no pueden ser sustituidos por otros elementos. Mantener un suministro equilibrado de nutrientes es crucial para fortalecer la resistencia de la planta y promover un crecimiento robusto, contribuyendo así a la salud general del cultivo.

La caña de azúcar crece de manera satisfactoria en una amplia variedad de tipos de suelos, si bien los más adecuados para este cultivo son aquellos de textura franca o franco arcillosa, que sean bien drenados, profundos, aireados, ricos en materia orgánica, con una topografía plana o semiplana y con un pH que oscile entre 5.5 y 7.5. Estas condiciones proporcionan un entorno propicio para el desarrollo saludable de la caña de azúcar y favorecen un rendimiento óptimo en la producción.

Fuente: Publiagro