Foto: Hernán Andia
Equipos de trabajo de la UGR en Cochabamba
La Unidades de Gestión de Riesgo (UGR) trabajan de manera paralela en proyectos para paliar la sequía, que aún persiste a pesar de la lluvia, y para evitar las inundaciones en zonas vulnerables ante la alerta del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) sobre la crecida de ríos.
Nueve departamentos de Bolivia fueron golpeados por la sequía debido a la demora de la lluvia, y desde el Viceministerio de Defensa Civil alertaron de un salto a posibles inundaciones, debido al fenómeno de La Niña.
De manera preventiva, algunos Gobiernos departamentales han comenzado tareas para evitar desastres. Una de las principales es identificar los puntos críticos o vulnerables para intensificar trabajos de dragado, construcción de gaviones, limpieza de canales, entre otras obras civiles.
“Las regiones trabajan para paliar la sequía y prevenir desastres por inundaciones”
Relevamiento
La directora del Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) de la Gobernación de Santa Cruz, Paola Weber, informó que se realiza un relevamiento de los puntos críticos para identificar qué trabajos se necesitan y se monitorea el cumplimiento de proyectos asumidos por los Gobiernos municipales. “En el caso de El Torno, por ejemplo, no hubo ningún tipo de trabajo y las lluvias se vienen encima”, reclamó.
Las zonas más vulnerables a riadas en Santa Cruz están en San Julián, Pailón, Cuatro Cañadas, San Pedro, Santiesteban, Portachuelo y Colpabélgica. Allí se mejoran los defensivos, se evalúa los sectores debilitados para reforzarlos, se vacían los canales para evitar la sedimentación y se limpia debajo de los puentes para evitar desbordes.