Cochabamba se sumó ayer a la marcha nacional “Por los sin voz” exigiendo un alto al maltrato animal y biocidios reportados en diferentes departamentos, el último en Santa Cruz, donde un adulto mayor mató a su gato, recibió una condena de dos años, pero se sometió al recurso de libertad condicional.


“Pedimos la modificación de la Ley 700 para que de alguna manera ya cambie la situación de las sanciones en vista de que existen muchos vacíos legales que ocasionan que no haya sanciones ejemplares para los maltratadores y biocidas. Ya estamos cansados de toda esta situación”, manifestó Vivian Sánchez, activista, rescatista y fundadora del refugio Una Mano Una Patita.
La Ley 700 para la defensa de los animales contra actos de crueldad y maltrato establece que todos los animales deben ser protegidos contra todo tipo de violencia, maltrato o crueldad y además que deben ser auxiliados en cualquier tipo de emergencia.
La normativa sanciona con privación de libertad de seis meses a un año a quien cometa tratos crueles contra los animales. En tanto, en los casos de “biocidio”, la pena es de dos a cinco años de privación de libertad y una multa de 30 a 180 días.


Para endurecer las condenas, hace un mes el senador Félix Ajpi, junto a la activista Silveria Laureano, presentó el proyecto de ley “de protección y defensa a los animales contra actos de violencia y maltrato”, que modifica la Ley 700, y que, entre otras sanciones, prohibiciones y aspectos varios, plantea sentencias que van desde uno hasta 10 años de privación de libertad a quienes incurran en maltrato animal o biocidio.
Asimismo, en el proyecto se propone una condena de tres a ocho años de reclusión en los siguientes casos: para el que provoque incendio poniendo en peligro los ecosistemas o la integridad de los animales, y por utilizar animales en prácticas sexuales, de pelea o tauromaquia; poseer animales silvestres o protegidos por ley.
Fuente: Los Tiempos