El empresario Rene Ibañez Salazar, realizó la presentación del Tabanato (bebida espirituosa), de origen itonama que se consume en todo el Beni. “Hemos hecho un estudio, sobre el sabor y elaboración, para hacer una réplica del producto con un fundamento técnico”, indicó a los presentes en su propiedad El Tábano Campestre, ubicada en la provincia Marbán.


Para elaborar el producto, es determinante la forma de pelar y exprimir la toronja o grey, hervir y los procedimientos para el macerado con carácter semi industrial. Refirió que el chaponato fue elaborado por primera vez en el año 1960, por don Andrés Arza Zampieri “Chapon”, apodo del cual deriva la palabra CHAPONATO.
Motivó su elaboración, debido a la lejanía y a la falta de medios de transporte de la provincia Iténez. Los curas no podían tener el aprovisionamiento de vino para la celebración de las misas católicas, por lo que encargaron a don Chapón elaborar un vino para las liturgias religiosas, quien luego de varios intentos fallidos en su elaboración, logró la fórmula ideal del chaponato.
Su preparación es a base de jugo de toronja madura, se le agrega azúcar y es sancochado (hervido) entre dos o más horas con el objetivo de sacar la acidez y el amargo de la toronja, en otras palabras, darle mayor concentración al jugo. Se mezcla con alcohol de caña, se envasa en botellones de vidrios y se entierra en el suelo con la finalidad de evitar el contacto con la luz y el excesivo calor que afecta a su añejamiento.
Tabanato es una versión del chaponato, que se elabora en el Tabano Campestre ubicado en la zona de de Sachojere provincia Marbán. La materia prima (toronja), es adquirida de los comunarios de Sachojere, Naranjito y San Andrés. Se prepara anualmente siguiendo la fórmula auténtica del itonama Chapón.


Reneco Ibañez como lo llaman sus amigos, aclara que la iniciativa no solo tiene fin comercial, sino hacer una promoción a fin de que la bebida se convierta en la identidad de la región. La idea es que, en el Beni se pueda elaborar el producto, cuidando el proceso de fermentación, macerado y envasado con una calidad determinada.
“Queremos crecer junto con los emprendedores que producen el chaponato, cada uno con su marca y esencia, solo hay que tomar en cuenta, las mismas condiciones en su elaboración. Con ello, se promueve un mejor precio de la materia prima en las comunidades. Se comenzó pagando la toronja a 25 bs el cien ahora se paga a 50 bs, algo que favorece a los vivientes”, expresó.
Agregó que, en el Tábano Campestre, están trabajando para darle el sello a esta bebida puesto que se ha convertido en la oferta gastronómica y turística de este atractivo campestre. Se busca llegar al mercado nacional e internacional.
Explicó que, para incursionar en el rubro, se contrató a un profesional enólogo especialista en elaboración de bebidas quien intervino desde la etapa del procesado, el almacenaje, análisis, conservación y embotellado.
En trabajo con el experto, permitió fusionar el conocimiento tradicional con el conocimiento técnico científico, sobre todo en el proceso de fermentación.
Tras su embotellado, el Chaponato es enterrado para evitar la contaminación y cuidar la temperatura. Para que haya una fermentación correcta del producto tiene que evitarse la luz y con una temperatura determinada (no muy caliente). Se replican las condiciones y la forma de enterrar el producto con un envase adecuado”.
René Ibañez Salazar, es un hombre polifacético, tiene habilidades para detectar oportunidades de negocios, entiende sin embargo que el disfrute del mismo, va más allá del dinero, una cualidad que posee todo emprendedor exitoso.
Redacción: Agenda Agropecuaria