Freddy Melgarejo, dirigente de ACIPA San Julián, formuló un claro llamado a las autoridades gubernamentales para que atiendan al sector que representa apoyándolos con una ley para el uso de la biotecnología, construcción de carreteras para tramos agrícolas y mejorar los precios que les cancelan por las cosechas por parte de la Agroindustria.
«Sin caminos transitables para sacar nuestros productos, sin biotecnología, sin apoyo del Gobierno nacional para mejorar los pagos que recibimos por las cosechas de soya y trigo que vendemos a Emapa, nos sentimos desmotivados».
Estas fueron las palabras de Freddy Melgarejo Soliz, presidente de Acipa del municipio cruceño de San Julián, al ser entrevistado por el equipo de Publiagro a fines de conocer en detalle los problemas que tienen en la actualidad los productores de soya y trigo, a pesar de los altos precios que ha alcanzado la soya en el mercado internacional.
Recalca, casi como una súplica, que el Gobierno debe elaborar lo más pronto posible una ley para el uso de la biotecnología, que permita el uso de los transgénicos que ya son utilizados en todos los países vecinos.
Es lo que piden, pero interpreta que el Gobierno, de alguna manera, está colocando trabas y evita que los productores agrícolas bolivianos accedan a una tecnología que está en vigencia en otras naciones.
«En esos países, gracias a la biotecnología, alcanzan rendimientos de cuatro a cinco toneladas por hectárea, mientras en Bolivia si acaso llegan a cosechar de 2 a 2,6 Tn por Ha», se manifiesta desmotivado.
Al referirse a la vialidad agrícola señala que se encuentra en pésimas condiciones y se necesita que el Estado les preste su colaboración para recuperar esos caminos por donde son sacadas las cosechas a los mercados y a los centros de acopio.
Rendimientos bajos en las cosechas
El dirigente considera que los rendimientos de las cosechas de soya han estado bajos en San Julián por cuánto, les afectó la sequía.
«Con bajos rendimientos, vamos a ganar un poco. Nos permitirá recuperar la inversión que hemos realizado y quedará algo de ganancia, ya que la verdad es que los precios son alentadores», señaló.
Sin embargo, plantea que si se basan en los precios internacionales que tiene la soya en los últimos meses deberían estar recibiendo como mínimo un monto de 470 a 480 dólares la tonelada, pero no es así en Bolivia.
No hay apoyo en el país
Tiene mucho optimismo en que podrían llegar a los 500 dólares por Tn motivado a la guerra entre Rusia y Ucrania, pero señala que en Bolivia no tienen una política gubernamental productiva que apoye a los productores y es por ello que no se le da importancia a los precios internacionales que ha alcanzado la soya.
«Si el gobierno se colocara la mano al pecho y velara por el productor podría haber incentivo para que cobre su tonelada entre 480 a 500 dólares», resaltó.
Cuando se le indicó al entrevistado que Emapa cancelaría 335 dólares por la tonelada de trigo, de inmediato señaló que ese precio ya lo tenían el año pasado, sin embargo, ha recibido informaciones de que este precio será mejorado por las autoridades.
Sabe perfectamente que el trigo no tendrá cosechas abundantes a nivel mundial este año y por ello esperan alcanzar un precio que sea mejor, porque a pesar de que es bueno, señala que los agroquímicos han subido en forma alarmante.
«En la actualidad la tonelada de trigo nos la deberían estar pagando a razón de 420 a 450 dólares por Tn, porque esa es la cantidad que cancela el gobierno al traer el trigo importado», dijo para finalizar.
Redacción: Publiagro
