Con el fin de incrementar la producción y el consumo de alimentos para contribuir a la seguridad alimentaria con soberanía, así como a la generación de ingresos familiares, el Gobierno nacional confirmó la implementación del “Programa Nacional de Fomento a la Agricultura Urbana y Periurbana”, para el periodo 2022 – 2025.
Mediante Decreto Supremo (DS) 4632, se autoriza al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, a través del Tesoro General de la Nación (TGN), transferir al Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT) Bs 79.799.208, presupuesto que llegará de manera directa a 5.500 familias de 37 municipios del país, enfatizando en la producción de apio, lechuga, vainita, perejil, tomate, brócoli, acelga y zapallito.
“En este marco, profesionales del MDRyT realizan visitas a diferentes regiones del país, con el fin de concretar el apoyo e incentivo a la producción agrícola”, informó este miércoles el MDRyT.
En ese contexto, se visitó los predios de la asociación PRRAI (Promoción de Redes Agroalimentarias Gastronómicas Inclusivas para el Desarrollo Sostenible de Familias Productoras Rurales), que cuenta con 12 miembros, comprometidos con la producción agroecológica en los municipios de Tiwanaku, Viacha y Senkata en la ciudad de El Alto.
Noemi Mamani, productora de esta asociación, señaló que la producción agroecológica significa el cultivo de vegetales y hortalizas mediante la agricultura evitando el uso de fertilizantes químicos, pesticidas, herbicidas, hormonas, elementos transgénicos y una amplia cantidad de métodos que pueden dañar el medio ambiente.
Explicó que tiene a su cargo, un invernadero, desde hace tres años, con una superficie de 72 metros cuadrados ubicado en la zona de Senkata – El Alto, en el que produce vegetales y hortalizas, que no son tan comunes en el mercado, como: cale, rúcula, espinaca bebe, acelgas de colores rojas y amarillas.
Mamani informó que PRAAI es una asociación que apoya a estudiantes y profesionales de la agricultura, en la construcción de invernaderos, así como en la producción y capacitación para la adecuada recolección, envase y comercialización de sus productos.
Indicó que, actualmente, trabajar en el invernadero es un apoyo económico para los pequeños productores. La muestra clara, dijo, es que en las áreas periurbanas se puede obtener cultivos de gran calidad.
Fuente: ABI
