El directivo de ese organismo, Gary Rodríguez, considera que con esta medida del Gobierno nacional los productores agrícolas tendrán acceso a créditos blandos para la producción de sus rubros.
El gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, considera de suma importancia y muy positiva la extensión del Decreto Supremo que sustituye las importaciones de alimentos en especial del trigo.
El especialista del IBCE manifestó que el Decreto Supremo emitido por el Gobierno nacional, crea dos fideicomisos administrados por el Banco Unión y otro por el Banco de Desarrollo Productivo por un monto global de 911 millones de bolivianos para efectos de sustitución de importaciones.
El nuevo Decreto es el 4509 está orientado a apoyar a los micro y pequeñas unidades productivas, pues permite a personas naturales y jurídicas, que cuenten con el sistema tributario simplificado en el sector agropecuario, a acceder a esos créditos.
«Esto es muy importante considerando que los bienes que se pueden sustituir están los alimentos, en especial los que tienen que ver con el trigo en el oriente del país, un cultivo de rotación con la soya y en otros departamentos para los que cultivan verduras, hortalizas y frutas», puntualiza el entrevistado.
Fue claro en señalar que, de esos 911 millones de bolivianos, promulgado a través del Decreto de diciembre del año anterior, solo se han colocado cerca de un 16% en los créditos.
Por ello considera que hay muchas oportunidades para que a muy corto plazo se pueda utilizar el remanente en el sector agropecuario con miras a sustituir la importación de trigo, aumentar la producción nacional de ese rubro con la finalidad de que la industria molinera nacional pueda mover una materia prima boliviana, incluso bajando la importación de harina.
El directivo del IBCE explica que según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de la gestión 2020 se han importado 364.130 toneladas de harina de trigo y 114.561 toneladas de trigo en grano.
«En grano y harina de trigo el Estado gastó más de 150 millones de dólares en 2020, por lo que felicitamos por esta medida al Gobierno nacional que dispone además una posibilidad de financiamiento a una tasa muy accesible del 0,5% para los productores agrícolas».
Agregó que no solo la sustitución de importación de trigo, sino muchos otros alimentos que se pueden cosechar en Bolivia y con los créditos a una tasa tan blanda del 0,5% anual el resultado será que en muy corto tiempo se podrán apreciar excelentes resultados.
El trigo es un cultivo de temporada de invierno y por ello el entrevistado aplaude la medida por cuanto además hay que añadir que el precio de referencia que tiene la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) es de 335 dólares la tonelada y si se le añade la posibilidad de un financiamiento bajo cree que el efecto se verá a muy corto plazo.
Asimismo, puntualiza que esta medida es muy significativa en términos de generación de empleos y alimentos para el país».
Sostiene que lo interesante es la posibilidad de acceso que tendrán los productores agrícolas para obtener los referidos créditos.
«Hasta donde sabemos este Decreto facilitará a que pequeños actores tengan acceso a los créditos en condiciones favorables, por cuanto los administradores de los recursos son dos bancos del Estado», culminó el ejecutivo.
Cita
«En grano y harina de trigo el Estado gastó más de 150 millones de dólares en 2020, por lo que felicitamos por esta medida al Gobierno nacional que dispone además una posibilidad de financiamiento a una tasa muy accesible del 0,5% para los productores agrícolas». Gary Rodríguez, gerente del IBCE.
Redacción: Publiagro