El productor Adrián Castedo Valdés señala que apenas les permiten vender al mercado internacional 16 mil toneladas cuando tienen un excedente de 40 mil. Asegura que hay carne de sobra en Bolivia y por eso no habrá desabastecimiento interno. Ratificó que el hato ganadero nacional está libre de fiebre aftosa


El dirigente ganadero Adrián Castedo Valdés informó que ya se inició el ciclo 41 contra la fiebre aftosa, un programa que desde hace más de 20 años se viene realizando con éxito en el país y es por ello que reiteró un llamado a las autoridades gubernamentales a los fines de que permitan la libre exportación de carne lo cual es necesario para la entrada de divisas al país que tanto las necesita.
«Cabalmente para entrar en el circuito de la carne mundial con la finalidad de proveer carne bovina al mundo es necesario ser un país libre de aftosa certificado por la Organización Mundial de Sanidad (OIE), lo cual lo hemos logrado en Bolivia después de más de 20 años de trabajo», recalcó.
La Fiebre Aftosa o Glosopeda es una enfermedad infecciosa que afecta a un gran número de especies, causada por un virus de la familia Picornaviridae, género Aphthovirus, que incluye 7 serotipos inmunológicamente distintos, así como numerosos subtipos diferentes.
Para alcanzar que se cumplan los objetivos de erradicar la fiebre aftosa el entrevistado precisó que esto se debe a un esfuerzo conjunto entre el sector privado y el público.
Les cerraron la libre exportación
Sin embargo, hizo un llamado a las autoridades gubernamentales por cuanto asegura les han coartado la libre exportación de carne al fijar un tope en 16 mil toneladas cuando tienen un excedente de 40 mil.
«Tenemos mucho trabajo y esfuerzo de las autoridades anteriores, en este caso ministros, viceministros, al igual que los representantes de la embajada de China, es decir hay mucho trabajo para que a raíz de una protesta de parte de los mayoristas de la carne a quienes les afecta un poco el negocio, dejan sin fuentes de trabajo a más de dos mil personas que trabajan en la industria de la carne», asegura.
De igual forma, señaló que es un golpe duro para la Chiquitanía en virtud a que el 70 por ciento del hato ganadero se encuentra en esa zona y es por ello que las previsiones de crecimiento han ido aumentando mucho y es por ello que se han alcanzado esos excedentes.


Lamentó que ahora todo ese aumento en el rebaño no lo podrán exportar lo que significa una caída en las inversiones y en las divisas para el país que tanto las necesita.
Refirió que hay muchos ganaderos que por esa medida del Gobierno están tan desanimados que han dejado de vacunar al ganado al preguntarse para qué van a seguir con ese negocio, sin embargo, señala que la gran mayoría están dispuestos a continuar el trabajo para mantener el estatus de país libre de aftosa.
«Esperamos que las autoridades analicen bien los números y nos permitan seguir exportando», agregó.
Por otra parte, señaló que el día lunes tienen una reunión con todas las asociaciones de la Chiquitanía con la finalidad de definir una línea de acción que sirva para tocar la conciencia de las autoridades con la finalidad de que esta situación se normalice.
«Es necesario continuar con la exportación de carne pues tenemos de sobra en Bolivia, además que lo que exportamos es lo que van pariendo las vacas y cada vez hay un mayor número de matrices. Por ende, hay un mayor número de animales que van al consumo».
Es por esta razón que asegura que no hay desabastecimiento interno ni lo habrá y señala que la exportación estimula al ganadero a seguir produciendo, ya que además generan las divisas que requiere el país en estos tiempos.
Señala que Bolivia tiene que cancelar 500 millones de dólares anuales y no se sabe de dónde saldrá ese dinero si la venta de los hidrocarburos y la minería ha caído, mientras que el único sector que ha estado generando divisas es el agropecuario a través de la producción de granos y de carne.
Fuente: Publiagro
Cita
«»Esperamos que las autoridades analicen bien los números y nos permitan seguir exportando». Adrián Castedo Valdés.
Cifra
16 mil toneladas es la cantidad de carne bovina que el Gobierno nacional colocó como tope para la exportación cuando los ganaderos tienen un excedente de 40 mil toneladas.

