La contundente decisión fue reafirmada por Néstor Huanca, ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, en una conferencia de prensa en la que señaló que los sectores pecuarios necesitan ese precio justo para mantener los precios a la población boliviana.


La banda de precios para la venta de subproductos de los derivados de soya se mantendrá vigente para las empresas oleaginosas, según lo informó Néstor Huanca, ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, en una conferencia de prensa en la que fijó la posición definitiva del Gobierno Nacional en esta materia.
Fue enfático en asegurar que las industrias oleaginosas deben vender a los pecuarios a un precio por tonelada de 295 dólares americanos y ese es el que está vigente en este momento.
Precisó el funcionario señaló que en los últimos días han ocurrido algunas acciones presentadas por el sector productivo el pasado fin de semana en las que rechazan una «presunta distorsión que se está realizando al proceso de negociación de los productores con las industrias».
En ese sentido fue claro en manifestar sobre esta materia que «la política del Gobierno Nacional es la de garantizar las condiciones equitativas del desarrollo de los diferentes sectores y al abastecimiento del mercado interno fundamentalmente».
Trajo a colación que era importante recordar que, durante el gobierno que califica de facto, se aplicó el Decreto Supremo (DS) número 4139 que afectó al sector pecuario nacional.
La libre exportación se realizó, según lo explica el ejecutivo, en sintonía con el modelo liberal que estaba dirigido a favorecer a un determinado sector y para ello incrementó los precios de venta de los subproductos al sector pecuario, por encima de los precios de exportación.
«Así se perjudicó al desarrollo igualitario de otros sectores, perjudicando especialmente a los pequeños productores agropecuarios. Por ello el Gobierno abrogó ese Decreto Supremo».
Presentó un cuadro en el que explicó que la banda de precios que se ha establecido puede demostrar que desde el pasado mes de enero empezó a subir y lo venden por encima del precio de exportación aspecto que considera favoreció a un pequeño grupo de industriales.
Sostiene que por esta razón los sectores avicultores, porcinocultores y lecheros han tenido que adquirir la harina de soya solvente a un precio de 2.700 bolivianos con lo que estima se corría el riesgo de que el sector pecuario tuviese que aumentar el precio de los productos alimenticios en desmedro de la economía de la población boliviana.
El Gobierno vela por precios justos
«Se tomó la decisión de abrogar ese Decreto Supremo que liberaba las exportaciones y colocamos en vigencia nuevamente las fórmulas y la aplicación de las bandas de precios con la finalidad de velar por la economía de la población boliviana, para que los alimentos lleguen a precios justos a los consumidores», sostiene con firmeza el ejecutivo.
Mostró otro cuadro para señalar que los precios históricos de los granos de soya, es decir, si la industria compraba a un buen valor ese rubro hace seis meses, el mismo se traducía en un buen precio de venta de subproductos en el mercado local.
«Es importante señalar que la banda de precios no establece el valor futuro del grano lo que determina es el costo de venta de subproductos de harina de soya solvente, la cascarilla y el aceite».
La banda de precios que establece el Gobierno Nacional, recalca el informante a través del ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Rural, «de ninguna manera puede ser utilizada para negociar el precio de compra del grano con los productores primarios afiliados a Anapo y a la Cámara de los pequeños productores».
Fue claro en señalar que el Gobierno de facto a pesar de que la industria oleaginosa fue favorecida con precios altos, el costo del grano de soya no obtuvo los incrementos que tenía la industria oleaginosa, por lo cual los más perjudicados fueron los pequeños productores.


Las exportaciones no están prohibidas
En cuanto a las exportaciones reiteró que no están prohibidas y aclaró que los únicos productos que necesitan certificados de abastecimiento son el arroz, la soya y sus subproductos.
«El Gobierno garantiza la exportación de los excedentes previo al abastecimiento al mercado interno, incluso en el pasado mes de diciembre, sin solicitud de la industria y sin trámites burocráticos, se emitieron los certificados de abastecimiento interno a precios justos para que puedan exportar sin problemas», afirmó.
En cuanto al grano de soya a través del DS 3920 del 29 de mayo de 2019 señala que se liberó el 60% de la producción para la exportación, por lo cual reitera que los productores afiliados a Anapo pueden exportar el 60% de su producción de ese rubro.
A una pregunta de los comunicadores manifestó que la banda de precios seguirá vigente, y señala que mejorarán los sistemas de aplicación, se comprometen a trabajar con la industria para que esta pueda abastecer oportunamente los subproductos de soya a los pecuarios de todo el país.
Deben cumplir lo acordado
«Solicitamos a la industria oleaginosa que cumpla con los convenios que, establecido, en forma separada, vale decir industria por industria que se han comprometido con el Estado para abastecer con los subproductos al sector pecuario, en este caso, a los avicultores, lecheros y porcinocultores», reiteró.
Dijo que estos tres sectores han manifestado su preocupación debido a que las oleaginosas no los abastecen oportunamente con los subproductos por lo cual reiteró su llamado a las empresas aceiteras a cumplir lo establecido.
«El costo justo que se ha acordado y firmado con la industria es el que debe cumplir”, sostiene el ministro, aunque en el mercado de exportación el precio supera los 500 dólares por tonelada.
Explica que con el precio justo para el mercado interno los pecuarios podrán vender sin aumentar los productos que ofrecen en el mercado nacional.
Recalca que el Gobierno no establece precio de compra del grano de soya por considerar que eso es un negocio entre la industria y los productores de soya, sin embargo, aclaró que la industria pareciera está utilizando como argumento para no pagarle a los productores de los granos de soya, la banda de precios que se ha establecido para los subproductos a los fines de presionar a un precio desigual a esos productores.
Y reiteró que la banda de precios solo se aplica de la industria para abastecer los subproductos de soya dirigidos a los sectores pecuarios del país.
Para finalizar indicó que mañana sostendrán reuniones con los pequeños productores a los fines de informar que la banda de precios no debería afectar a la producción del grano de soya en el departamento de Santa Cruz.
Fuente: Publiagro

