A más de un año de la paralización del funcionamiento de la planta de urea y amoniaco, el país ya no puede abastecer su propia demanda. Los productores tienen dificultades para encontrar el fertilizante y deben pagar hasta un 40 por ciento más.
A más de un año de la paralización del funcionamiento de la planta de urea y amoniaco, el país ya no puede abastecer su propia demanda. Los productores tienen dificultades para encontrar el fertilizante y deben pagar hasta un 40 por ciento más.
El país pasó de ser exportador a importador del fertilizante. Las compras subieron en 400 por ciento, mientras que las ventas cayeron en 94 por ciento.
Ante la falta de la urea nacional, los productores tuvieron que recurrir al fertilizante peruano, chino, ruso, argentino y brasileño. Estos dos últimos países eran los principales compradores de la urea boliviana.
A pesar del incremento de la importación, los productores tienen dificultades para encontrar urea en el mercado. El representante de la Unión de Bananeros de Cochabamba (Uniban), Agustín Conde, indicó que una bolsa de 50 kilos de urea nacional costaba 150 bolivianos, pero ahora deben pagar por la urea importada 210 bolivianos.
“No se puede encontrar, es a lo que pesques urea peruana o china”, dijo.
En Chapare hay 7 mil hectáreas de cultivos de banano. Cada hectárea requiere trimestralmente una bolsa de urea de 50 kilos, por lo que en un año los productores usan 1,4 millones de kilos.
“El precio de la urea importada es muy alto y afecta a los productores, por eso queremos que el Gobierno de una vez se ponga la mano al pecho y empiece a funcionar la planta de urea. Era más barato la nacional, la gente accedía más fácil, ahora es a lo que encuentres”, indicó.
La planta de Bulo Bulo permanece inactiva desde octubre de 2019, época de los conflictos poselectorales que derivaron en la renuncia del expresidente Evo Morales.
En enero de 2020, el Gobierno de Jeanine Áñez anunció el cierre definitivo de la planta y su posterior traslado a Santa Cruz por un supuesto déficit, pero un mes después se retractó y anunció la reanudación de operaciones, pero hasta la fecha ello no ocurrió.
Entre enero y octubre de 2020 el país importó 13 millones de kilos de urea, valuados en 4,8 millones de dólares; en ese mismo periodo de 2019 importó sólo 3 millones de kilos por un valor de 1,2 millones de dólares, según datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
El principal proveedor el 2020 fue Rusia, país del que Bolivia importó 8,4 millones de kilos por un valor de 3 millones de dólares. Le sigue Perú con 4 millones de kilos por unvalor de 1,4 millones de dólares. Del mercado chino se compró 168 mil kilos valuados en 74 mil dólares. (Ver infografía)
A pesar de la paralización de la planta de urea, el país logró exportar a Brasil 21 millones de kilos por 5 millones de dólares. En tanto, a Perú se envió 784 mil millones de kilos por los que percibió 154 mil dólares.
En 2020 no se exportó urea a Argentina, pero el país vecino fue el principal comprador del fertilizante entre enero y octubre de 2019, cuando adquirió 172 millones de kilos, por los que pagó 42 millones de dólares.
En 2018 se vendieron 265.258 toneladas de urea, de las cuales 240.502 fueron al extranjero. Brasil compró 170.496, Argentina 56.311, Paraguay 11.496 y Uruguay 2.199. En 2017, se vendieron 6.372 toneladas de urea sólo al mercado nacional.
Contratos interrumpidos
Según el reporte de la Audiencia de Rendición Pública de Cuentas Parcial 2019 de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), la planta de urea tenía una proyección de venta en 2020 de 695 mil toneladas de fertilizante, de las cuales 639 mil debían exportarse a Argentina, Brasil, Perú, Paraguay y Uruguay.
En las proyecciones, Brasil era el principal comprador con 515 mil toneladas, seguido de Argentina con 65 mil, Paraguay con 25 mil, Uruguay con 24 mil y Perú con 10 mil. Sin embargo, durante el Gobierno de transición se informó que algunos contratos fueron interrumpidos ante las pérdidas que implicaban.
El reporte menciona que el 20 por ciento de la producción de urea era para abastecer el mercado interno y el 80 por ciento restante para la exportación.
Fuente: Los Tiempos