El flujo de camiones que trasladan frutas, verduras y hortalizas se redujo de 20 a solo cuatro por día. Los agricultores piden garantías para abastecer el mercado interno.
Debido a la cuarentena que rige en el país por la aparición del coronavirus en Bolivia se agota la provisión de suministros básicos en supermercados y mercados. El fenómeno no se debe a la escasez de productos sino a falencias logísticas para el transporte de los productos; desde los Valles cruceños hasta los centros de abastecimiento de la ciudad.
Es por este motivo que personas como Olga no encontró verduras en el mercado Los Pozos y Florida. Hasta esos lugares se desplazó la mujer de 50 años para buscar productos de primera necesidad para alimentar a su familia. La mujer también recorrió dos supermercados donde apenas logró aprovisionarse de cebolla y tomate. “El estante de la fruta estaba vacío”, señaló la mujer, que por suerte encontró harina para hacer pan para sus hijos.
En este tiempo lo que más buscan las personas son el tomate, cebolla, papa y cítricos, además, de frutas como el banano.
Ivert Miranda, presidente de la Asociación de Productores de Hortalizas y Frutas (Asohfrut), admitió que hay desabastecimiento de verduras y hortalizas debido a los estrictos controles que aplican en los caminos que conectan a Santa Cruz con las zonas productoras en los Valles cruceños.
A esto se suma la venta irregular debido a las restricciones de circulación que impuso el Gobierno a las personas, limitando la salida de acuerdo a la numeración de la cédula de identidad.
“La gente no está saliendo en cantidad a hacer compras. Los agricultores de los valles han salido a vender, pero se quedaron con gran cantidad y algunos han tenido que botar la producción. No estamos bien. No se está cumpliendo con el abastecimiento”, señaló.
El dirigente lamentó que a pesar de haberse reunido las autoridades policiales y coordinar que se dé vía libre a la circulación, de los vehículos que transportan alimentos, estos acuerdos no se cumplen al pie de la letra.
“Hemos hablado con el comandante, pero los policías no entienden. Solo quieren arrestar y cobrar multas. Nuestros productores han decidido no salir. Si los policías entendieran, el abastecimiento sería normal”, se quejó Miranda.
Hasta antes de esta cuarentena, entre 18 y 20 camiones, con capacidad de seis toneladas, llegaban de forma diaria desde los valles “pero ahora, a lo mucho, llegan tres o cuatro”.
“Vamos a intentar sacar permisos para unos siete camiones más”, señaló.
Dijo que por este motivo los intermediarios empezaron a especular con los precios.
Desde que se lanzó la cuarentena, para evitar la expansión del coronavirus en el país, el Gobierno indicó que daría vía libre, e incluso ayudaría, a los productores de alimentos para que puedan llegar a los centros de abastecimiento.
Pero los hechos demuestran otra cosa: “Hijo, uno no pilla nada en los mercados. Hay que pelearse con la gente, para agarrar una lechuga”, sostiene Olga.
Fuente: Periódico El Deber
