Las proyecciones de la empresa son enormes, por ello que los ejecutivos están por implementar el sistema de registro y control.
La planta procesadora de lácteos de San Andrés, dependiente de la Empresa Boliviana de Alimentos (EBA), está llegando al 60% en su producción una capacidad de procesamiento producida entre 6000 a 8000 días.
José Chambi, jefe de la planta en cuestión, informó que la producción ascendente es fruto del trabajo conjunto entre ejecutivos, técnicos y productores, pues la calidad de la leche se ha mejorado desde el inicio del 2018, incluso arriba del estándar establecido, ello abre la perspectiva de abrir aún más mercado.
Señaló que las proyecciones de la empresa son enormes, por ello es que los ejecutivos están por implementar el sistema de registro y control dado que se trata de la planta más moderna que tiene Bolivia.
En materia de producción de lácteos de las cinco plantas que tiene EBA en Bolivia, la planta San Andrés es la más moderna.
También explicó que las mejoras tecnológicas están trabajando en a un 100%, sobre todo en el manejo productivo.
“Antes sólo trabajábamos en un solo turno, hoy se lo hace en dos”, dijo Chambi, lo que ha permitido que algunos trabajadores reciban su contrato siempre encaminados a la estabilidad laboral.
Agregó que el principal objetivo por ahora es llegar a procesar los 20,000 litros de leche por día, se trabajará por tanto en acortar los tiempos de producción, incrementar el ingreso de leche y ampliar la línea de producción.
Informó que el producto elaborado en la planta San Andrés está siendo llevado a la ciudad de La Paz, Oruro y Potosí, y a partir del 3 de marzo también entrará en el mercado de Trinidad.
Para el ingeniero químico de profesión, lo importante es que el productor lechero ya está adquiriendo una cultura de crianza de ganado lechero de alta genética, esto está permitiendo incrementar el volumen de producción.
Fue reiterativo en la mejora de la calidad de leche, considerando que esto ayuda a la duración del producto y no se tengan que ocupar en que la leche puede acidificarse o incremente su nivel de PH.
Es optimista al indicar que para el año 2022, ya se estará procesando 15,000 días, todo va por mejorar la calidad de la leche y por ende otros elementos que ayudarán a alcanzar las metas.
La planta demandó una inversión de Bs. 86.8 millones, lo que ha permitido abrir la era de la industrialización en el Beni.
Fuente: Periódico La Palabra del Beni