Los forestales afirman que durante 2019 la desburocratización en el transporte y comercio de madera ha dinamizado al sector, logrando tener al momento un saldo positivo en el comercio exterior..
En ese sentido, señalan que el Gobierno de transición puede impulsar aún más la reactivación del sector forestal con la restricción a las importaciones de madera, que siguen asfixiando sobre todo a carpinteros e indígenas.
Jorge Ávila, gerente de la Cámara Forestal de Bolivia (CFB), informó que se prevé alcanzar los $us 60 millones en exportaciones este año, aunque admite que los 21 días de paro pueden ser determinantes en las cifras. Asimismo, considera que la madera de importación continúa siendo un factor que impide crecer a la producción nacional.
“La política más urgente para este Gobierno, es la regulación de las importaciones de madera”, dijo.
También comentó que en 14 años del anterior Gobierno solo se reunieron una vez con el ministro de Medio Ambiente. Mientras que en un mes del nuevo Ejecutivo ya se han reunido con los ministros de Medio Ambiente, María Elva Pinckert y de Desarrollo Productivo, Wilfredo Rojo.
Fuente: Periódico El Deber