El Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT) fue usado por César Cocarico (MAS) para comprar la conciencia de dirigentes campesinos e indígenas, cometer delitos contra el medio ambiente y traficar tierras, denunció Julio Peñaranda, del pueblo mojeño-trinitario del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
El también asistente para consolidar el Tribunal de Justicia Indígena y apoderado de la Nación Qhara Qhara (Chuquisaca-Potosí) manifestó que el gobierno del Movimiento al Socialismo no respetó ni cumplió los mandatos de su propia Constitución, con relación a los derechos de los pueblos indígena originarios del país.
“Una de las primeras tareas que deberían haber hecho, para cumplir con la Constitución, es que los pueblos originarios tengan representación directa en el Parlamento por usos y costumbres, pero lastimosamente al MAS, con su mayoría, nunca le ha interesado eso”, dijo.
Mala administración
En esa línea, enfatizó que el MDRyT fue mal administrado y que solo sirvió para comprar la conciencia de dirigentes, cometer delitos contra el medio ambiente y traficar tierras. A esto se suma el manejo del Fondo Indígena que, según el dirigente, fue un “escudo” para desviar recursos económicos a costa de las necesidades y demandas de los campesinos.
“Hay varias irregularidades que se deben investigar de la gestión del MAS; la Chiquitania ha ardido por culpa de Cocarico, el TIPNIS tiene problemas dirigenciales por culpa del MAS, las leyes, que supuestamente van en favor de los indígenas, han sido manipuladas por Cocarico, se han despojado tierras a los pueblos, entre otros”, aseveró Peñaranda.
Consultado si el actual Gobierno (de transición) debe iniciar un juicio de responsabilidades en contra del exministro, el dirigente afirmó que son los pueblos originarios y campesinos los que deberían dar pie a cualquier acción legal, ya que son los directos afectados.
Clan familiar
En 2018, el diputado Amílcar Barral (UD) presentó una denuncia penal en contra del entonces ministro César Cocarico por los delitos de incumplimiento de deberes, encubrimiento y omisión a denuncia en el caso Clan Cocarico. En esa época, recordó que su hermano (Rogelio Cocarico Yana) guardaba detención en el penal de Palmasola, sindicado por la “estafa agravada de $us 200 mil” que cobró a una comunidad menonita para sanear “tierras ilegales” y fiscales en 2016.
También está denunciado un segundo hermano (Luis), quien en 2016 fue acusado de estafa agravada en la localidad Arenales de Yunchará, Tarija. Prometió comprar un tractor y a cambio pidió Bs 150 mil, pero luego desapareció.
En pasados días, el viceministro de Desarrollo Rural y Agropecuario, Luis Alberto Áñez, reveló que el exministro (César Cocarico) incurrió en varios hechos irregulares que serán presentados y detallados con documentos en los próximos días.
“Voy a llamar a una conferencia de prensa para mostrar documentos y papeles de los proyectos fantasmas y todo el despilfarro de plata que hizo el exministro Cocarico”, anunció.
Persecución
Consultado sobre estos supuestos hechos irregulares dentro del MDRyT, que apuntan como directo responsable al exministro Cocarico, el diputado del MAS Franklin Flores mencionó que son acusaciones vinculadas, por el actual gobierno, a “una persecución política”.
“Todos los hechos e inversiones que realizan o han realizado las autoridades van a la Contraloría y el MAS ha basado su gestión en el marco de la ley. Pero, veremos cuál será el curso de estas acusaciones hechas por el actual gobierno, que según su mandato y atribución solo debe convocar a nuevas elecciones y no generar más polémica”, dijo.
Fuente: Periódico Bolivia