Industriales estiman moler más de 8,1 millones de toneladas de caña para procesar más de 11,5 millones de quintales de azúcar y 200 millones de litros de alcohol. Exportan, con precios bajos, a países vecinos.
Las cinco factorías que operan en la mancha urbana de la ciudad capital de Santa Cruz y el área de influencia cañera de los municipios Colpa Bélgica, Montero, Minero y Aguaí logran refinar más de 10 millones de quintales de azúcar al 77% de avance de zafra. Con ese volumen producido, el sector garantiza el stock de seguridad del mercado interno, que ronda los 8,5 millones de quintales del edulcorante.
El balance de desempeño productivo en campo, a decir de productores cañeros e industriales, es generoso porque el rendimiento cultural de la caña fue mejor al alcanzado en 2018. El promedio fue de 53 toneladas de caña por hectárea -en 2018 no superó las 51 toneladas-. Atribuyen el repunte a la renovación de caña con variedades acordes al tipo de suelo, expansión del uso de fertilizantes y a las lluvias que este año acompañaron el desarrollo vegetativo de la caña.
Con este dato y la caña aún disponible en campo -unas 33.000 de las 159.764 ha cultivadas este año- el sector azucarero cruceño estima moler más de 8,1 millones de toneladas de caña para procesar más de 11,5 millones de quintales de azúcar y 200 millones de litros de alcohol. Contabilizando la producción del ingenio azucarero Bermejo, en Tarija, y de la estatal Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba), en La Paz, se proyecta una producción nacional de más de 12 millones de quintales del grano dulce cristalino.
Producción del grano dulce
El recuento de producción sectorial en los ingenios cruceños detalla que Guabirá registra una producción de 2,3 millones de quintales de azúcar; Unagro, 2,9 millones; La Bélgica, 1,2 millones; San Aurelio, 2,3 millones; en tanto que Aguaí, 1,2 millones. La cantidad de caña molida por dichas factorías, al presente, ronda los 6,7 millones de toneladas.
Desde las factorías
El balance agrícola contrasta con el corporativo y el financiero. Fuentes del sector industrial denotan un recuento con sabor agridulce debido a los excedentes aún existentes de azúcar -hasta septiembre se contabilizaban 3,6 millones de quintales incluyendo saldos, reservas de seguridad y excedentes de la última y actual zafra- y exportación del producto, en un contexto internacional de precios deprimidos. Hoy por hoy, Perú, Colombia, Perú y Chile son los países de la región que absorben la oferta exportable de azúcar.
Según el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), hasta julio del presente año, Bolivia exportó 50.601.232 kilogramos brutos por un valor de $us 19.077.312.
En septiembre, el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, la Confederación Nacional de Productores Cañeros de Bolivia y los ingenios acordaron exportar 2,1 millones de quintales de azúcar del saldo exportable que se estima alcanza 3,6 millones de quintales.
Desde el ingenio La Bélgica, su presidente, Rodrigo Gutiérrez Fleig, informó de que la zafra registra un 80% de avance. De las 15.500 hectáreas de caña cosechada, dijo que han molido 700.000 toneladas para refinar un millón de quintales de azúcar y destilar 11 millones de litros de alcohol.
Mencionó que La Bélgica ha exportado 6.000 toneladas de azúcar (120.000 quintales) y que prevén vender otras 4.000 toneladas (85.000 quintales). Ecuador, Perú, Colombia y EEUU son los países que concentran las compras. “Exportar es mal negocio, pero no queda otra. Estamos saturados de azúcar, perdemos plata exportando a los precios actuales”, apuntó.
Desde Easba, que emprendió su segunda zafra oficial a fines de julio, el gerente general Ramiro Lizondo, citado en la estatal ABI, refirió que prevén moler 220.000 toneladas de caña para producir 400.000 quintales de azúcar y tres millones de litros de alcohol.
Fuente: Periódico El Deber
