Por el descuido de sus propietarios, es frecuente que perros que salen a la calle sean atropellados por vehículos. Cuando las heridas son de gravedad, se procede a la amputación.
Yuki fue rescatada en un lote baldío cuando era una pequeña cachorra. Tenía las dos extremidades traseras amputadas y apenas se arrastraba. Alguien le había colocado torniquetes en sus patas, después de, probablemente amputárselas.
Marcelo Rodríguez, quien encontró a esta perrita, se encariñó de ella, la adoptó, junto con su familia, y le colocaron el nombre de Yuki, que en japonés significa Felicidad.
El de Yuki es uno de los casos que se han atendido en las veterinarias de Cochabamba, de mascotas que, por alguna razón, han perdido uno o más miembros y que tienen entre sus opciones la eutanasia o una recuperación lenta.
Yuki tiene medio año y en los últimos meses se ha recuperado notablemente, cuenta Marcelo, quien encomendó la fabricación de una silla de ruedas a medida para que pueda desplazarse de un lugar a otro. “Una prótesis no le serviría mucho, porque es una mascota grande, de 18 kilos, “y por su peso podría lastimarse”.
Una dificultad es que Yuki todavía no se adapta a la silla de ruedas y para salvar este problema la entrenan cada día media hora.
Marcelo le prepara cada día su comida, sopa de pollo con cadera, zanahorias y arroz y le cura las heridas que se hace al rasparse sobre el sillón y la cama.
Asegura que encontrar a Yuki representó un gran cambio en su familia, “porque es como tener un niño pequeño, está limitada a nuestra ayuda”.
ACCIDENTES
El atropello de perros es bastante frecuente en la ciudad, con secuelas para las mascotas, como las múltiples fracturas, afirma el gerente general de la clínica Vidavet, Enrique Mendizabal.
Lo preocupante es, según este médico veterinario, que los dueños descuidan a sus mascotas y les dejan salir a la calle, o lo hacen en forma deliberada, lo cual se constituye también en maltrato.
Los perros que son atropellados sufren fracturas de cadera, de sus patas, con varios huesos rotos, y heridas profusas. En estos casos, lo primero que se hace es estabilizar al perro y sacarle del shock, “pero si hay una fractura expuesta se hace un manejo inmediato, porque no se puede esperar”.
“Lastimosamente, las personas que dejan a sus mascotas en la calle y son atropelladas no tienen solvencia económica, en general, por lo que piden que se proceda a la eutanasia”.
La atención de una fractura implica que la familia tendrá que erogar gastos elevados y brindar mucha atención, porque el perro no se quedará quieto y se puede volver a lesionar. “Por eso mucha gente opta por la amputación del miembro afectado o, en casos extremos, la eutanasia.
Lo rescatable de una amputación, según el veterinario, es que el animal recupera su movilidad. Es más fácil vivir con tres patas que con una cuarta en mal estado. La mascota se adapta a vivir sin una pata y vuelve a saltar y jugar, hace una vida normal, pero al no tener una pata se debe tener cuidado con sus articulaciones y con su peso.
Otras mascotas han recibido un duro golpe y han quedado con la columna lastimada. A estos pacientes, que no pueden mover el tren posterior, se les coloca sillas de ruedas con lo que se les mejora la vida, significativamente.
Para las mascotas que han perdido algún miembro, en otros países se fabrican prótesis con impresoras 3D, “pero que cuestan bastante, esperemos que lleguen pronto a Bolivia”.
SILLAS DE RUEDA
La silla de ruedas para Yuki costó unos 500 bolivianos, la cual fue hecha a medida.
En Cochabamba, para las mascotas que sufren amputaciones de sus miembros, la veterinaria Ruedas Can se especializa en la fabricación de sillas de rueda y otro tipo de artefactos, desde hace siete años.
La propietaria de la empresa Rebeca Poma Castellón relata que el caso de una perrita maltratada, cuando ella cursaba la mitad de la carrera de Veterinaria, le impulsó a fabricar estos aparatos.
Cuando encontró a esta mascota y la llevó por varias veterinarias, la única alternativa que le propusieron era hacerla dormir, es decir, aplicarle la eutanasia. No se resignó, y como no había andadores para comprar, decidió hacerlo ella misma.
“Hicimos el primer andador para esta mascota, y con el pasar de los años fuimos haciendo otros más, a medida que crecía, por lo menos fueron 20 sillas”.
Después de esa primera experiencia, la veterinaria empezó a fabricar más andadores y prótesis para otras mascotas, “porque cada perrito es diferente y no todos tienen la misma discapacidad ni el mismo problema”, afirma.
PRODUCTOS
Poma afirma que en su empresa fabrican todo tipo de artefactos, desde férulas, coderas, rodilleras, protectores de las caderas, arnez posterior y artefactos especiales para las mascotas ciegas.
“Nos traían perritos ciegos que tenían andadores, pero que necesitaban un artefacto que les evite lastimarse la cabeza y la nariz. Por eso hicimos protectores y bastones”.
Para los gatos se fabrica también los andadores ortopédicos.
Ruedas Can utiliza fibra de carbono para las prótesis en miembros delanteros, y las fabrica con el apoyo de la impresora 3D. Otro material que se usa es espuma de polietileno. “Para los andadores ortopédicos estamos trabajando con tubos y los permanentes con acrílico”.
“Hasta ahora se debió fabricar algo de 900 andadores y entre los artefactos alrededor de 300, coderas y rodilleras” puntualiza.
Poma señala que por el momento, no hicieron prótesis para miembros delanteros o posteriores de los gatitos, pero están en busca de algún paciente que pueda necesitar una.
En esta veterinaria se realiza también el servicio de fisioterapia e hidroterapia, masajes y rehabilitación en perritos. Los especialistas de la empresa se encargan de la recuperación postoperatoria de las mascotas.
“Cuando una mascota tiene, por ejemplo, hernia de disco, la primera instancia es la fisioterapia, y en segunda instancia una cirugía. Luego nos encargamos de que pueda volver a movilizarse”, afirma Poma.
Ruedas Can prevé abrir en dos meses un nuevo centro en el que se tendrá magnetoterapia y otros equipos modernos que ya son fabricados por ingenieros.
Fuente: Periódico Opinión
