El reciente decreto 5271 aprobado por el gobierno, que permite la importación y comercialización de combustible durante un año, ha generado preocupación e incertidumbre entre las empresas y productores de etanol destinados a los biocombustibles. El presidente de la empresa Granosol, William De Las Muñecas, expresó su inquietud, señalando que la medida no especifica el precio al que se establecerá el combustible importado ni la forma en que se integrará con el etanol producido en Bolivia.

“Lo que necesitamos con urgencia es tener certeza de si el combustible importado se va a incorporar al mercado nacional con el tren del alcohol. Si no es así, se está destruyendo todo el trabajo que se ha realizado en los últimos 8 años con la producción de biocombustibles”, explicó De Las Muñecas. El empresario subrayó la importancia de garantizar que la importación de gasolina se haga con la adición de etanol boliviano, tal como lo estipulan las normas de calidad de las gasolinas en el país, específicamente los estándares RON 85 y RON 95.

Propuesta para asegurar el uso del etanol boliviano en el blend
De Las Muñecas enfatizó que la mejor opción sería que toda la gasolina importada por el sector privado llegue a Bolivia sin etanol, para que luego se le agregue el biocombustible producido en el país. De esta forma, se cumplirían las normativas de calidad y se garantizaría la continuidad del mercado del etanol.

“Si la gasolina importada ya contiene etanol de otro origen, el trabajo realizado con los biocombustibles en Bolivia quedaría en peligro. Esto es algo que debemos analizar detenidamente con el gobierno para garantizar que toda la gasolina que ingrese a Bolivia se complemente con etanol producido aquí”, agregó.

“Lo que necesitamos con urgencia es tener certeza de si el combustible importado se va a incorporar al mercado nacional con el tren del alcohol. Si no es así, se está destruyendo todo el trabajo que se ha realizado en los últimos 8 años con la producción de biocombustibles”

El presidente de Granosol destacó que el etanol boliviano ha sido un factor clave para reducir los precios del combustible en el país. En este contexto, pidió que el gobierno asegure que el biocombustible nacional continúe siendo entregado a los importadores de gasolina, como un aditivo vegetal para cumplir con los estándares de calidad.

“Es crucial que la gasolina que llegue por importación de privados sea sin etanol, y que nosotros, como sector privado, podamos agregar etanol boliviano para alcanzar los requisitos del RON 85 y RON 95”, explicó.

Desafíos para el mercado de biocombustibles
De Las Muñecas advirtió que, si se permite la importación de gasolina ya mezclada con etanol de otros orígenes, el mercado de los biocombustibles en Bolivia podría quedar marginado, lo que afectaría la producción local y la estabilidad de la industria.

Ante esta situación, los empresarios del sector piden al gobierno que asegure un esquema de importación que respete y fomente la integración del etanol boliviano en la cadena de valor del combustible. De lo contrario, el sector de los biocombustibles podría verse gravemente afectado, poniendo en riesgo la sostenibilidad de los esfuerzos realizados en los últimos años para fortalecer la producción de etanol en Bolivia.

Fuente: William de las Muñecas

Redacción: Publiagro